lunes, 22 de agosto de 2011

Él...

¿Que es lo que le hace tan irresistible? Tal vez sus ojos, quizás su mirada, su sonrisa de niño, sus manos, sus brazos largos y fuertes, a lo mejor su cuerpo grande, largo y estilizado, tal vez su melena rizada, o quizás su voz dulce que incita a cometer más de una locura. Quién sabe todo lo que te puede atraer a el, puede que sea por su ingenio, su inteligencia, su sentido del humor, que aunque raro acaba tornándose en tardes llenas de risas a su lado, tal vez te sientas atraída hacia el simplemente por el echo de saberlo inalcanzable, inaccesible y tal vez, solo tal vez cuando ya lo tengas entre tus brazos no lo dejarás escapar nunca o te aburrirás de el como un niño de sus antiguos juguetes cuando llega el día de Navidad. Pero nunca tendrás el lujo de descubrirlo, nunca sabrás si te aburrirías de el, por que no te dejará que lo intentes. Y en eso se basa su atractivo, en que aunque lo tengas nunca será tuyo, ni de otra, él no es de nadie.
Lo buscarás en otros cuerpos, querrás que todo hombre con el que te topes sea él, pero en el fondo y por mucho que lo intentes sabes que es único, y aunque intentes aparentar diciendo que no te atrae, vamos, todos sabemos que no es así, él es él y nunca habrá hombre que te atraiga más.
No es el más guapo, no es el más fuerte, no es el más listo,ni el más atento, generoso o divertido, pero de todo le sobra. Tiene de todo un poco y entre eso y su forma incesante de hacerse de rogar, crea un halo de misterio a su alrededor, que como no le hace aún más irresistible. Y  ahora que sabes como es él, sé que también quieres conocerle y sentir sus brazos rodeando tu cuerpo, pero a las que lo tuvimos y perdimos nos costó conseguirlo, intenta lo pero te lo advierto, cuando empieces ya nunca podrás parar, querrás que sea tuyo para siempre pero recuerda lo que te he dicho, él no es ni nunca será de nadie.



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